domingo, 29 de noviembre de 2009

Panal en un poste

Caminando por la calles de Medellín, haciendo zig zag por los barrios para llegar rápido y
evitar los ladrones de esquina concurrida.
Así fue como me encontre el panal "mierdero", como lo llamabamos en el barrio.

Siempre yo evitaba que alguien lo patiara. "Parce, qué le están haciendo las abejitas a usted?"
Había que peliar, porque la sensación animal de patiar y destruir y matar una comunidad de una especie más pequeña, es casi inevitable en los hombres de estos tiempos.

Hasta me quedaba mirando cómo trabajaban, cómo zumbaban. Y cuando iba ya a una cuadra de distancia, veía a un niño agacharse, y después correr, y hasta ahí llegaba mi conexión con las especie, y animales, y vidas.

A las mierda las abejas y sus casas en cualquier hueco, y a los hombres tan estúpidos y juguetones!

martes, 24 de noviembre de 2009

Hoy, cayó del cielo

Sentí un aleteo en el patio, y pensé una frase de esas literarias que se me ocurren: “y el pajarito cae del cielo, y el gato no lo deja reaccionar”, pero no me para bolas, y seguí “metido” en internet.

Al rato, efectivamente, un pájaro estaba en la boca del gato blanco y negro, que llamamos MAX por costumbre, porque por obediencia no es.

¡Mierda!
Ya era demasiado tarde, ya el pájaro, la tortolita no tenia salvación. Y por supuesto, a mi se me conmovió todo. Que pesar!
Era ya del gato. Ley natural. La tortola dio papaya, Max estuvo atento.
Y Juan David con el corazón arrugao, haciéndose el bobo, y llamando a su hermano para que botara el cuerpo aporreado y sin vida de una pajarito que fue muerto por dos gatos que ya estaban durmiendo la jugarreta. Ni se lo comieron (bueno, mejor, porque quién se aguanta la mortecina).
Ya en la mañana, solo había plumas.
Y a pesar de eso, el gato en la misma posición que lo he visto en todas las casas durante toda su vida: Mirar para arriba, a ver qué se mueve, y qué cae.
Nunca le había caído nada. Anoche tuvo mucha suerte. Y hoy seguía en las mismas.

El compañer@ de la victima estaba buscando a su compañer@. Pesar! En serio. Pero asi es la naturaleza.
Le grite que ya estaba buscando algo que no estaba, que volara, y que pilas con los gatos, que eran unos hijos de putica que no entienden que está casa es NO violenta por naturaleza. Es que se le olvidan.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Hoy, el problema de la U Pública

Acabo de llegar de la reunión citada con el Decano de la Facultá, para hablar de los problemas de la U.

Antes, hicimos parcial (más un taller), a pesar de la anormalidad académica declarada por la Asamblea general de la Universidad de Antioquia.

Como llevamos varios meses parando, arrancando, yo vote y propuse que hiciéramos parcial, y que después Decano de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas del Alma Mater.

El gran problema, entre muchos, es que el asunto de la Universidad Publica es grave, y nadie sabe.

La universidad tiene un déficit grandisimo, y un futuro incierto.
Por eso tanta asamblea. Por eso tanta marcha.

El Decano expone sus puntos: Que también están buscando formulas, que la Ministra ya está reconociendo problemas, que es mejor no parar más la Universidad, que la violencia usada de aquí y de allá es preocupante.

Luego, los Estudiantes, que supongo son los que hablan siempre, dieron sus argumentos, sus quejas, sus propuestas.
Muchas preguntas, muchas denuncias, muchos problemas.
El problema de la U Pública es estructural, y también de muchos detalles.

Y el lío, y las trifulcas, y la crisis no es de ahora. Desde los 60´s o antes (si alguien me corrige). Lo que pasa es que ya casi todo está tocando fondo en el país, y estamos parados en una coyuntura que hacen, o mejor, obligan a los dolientes a moverse, a protestar por una de los pocos espacios libres y re-volucionarios que tenemos en Colombia.

Ahí sentado escuchando los argumentos de los pacifistas, y de los beligerantes, y de los que ni fu ni fa, y el de UN solo profe, yo iba pensando en cada argumento, llevándolo a mi forma de estar en la U, y bueno, cosas se me ocurrieron, Un ejemplo:

Hacer el parcial, así estemos en asamblea compañeros. Hoy tocá una protesta que sea más inteligente que el sistema. Y como yo trabajo, y estudio, y hago vainas y vainas hasta que dan la 1am. Todos los días. Todos los días en el sistema. Pero luego intento empaparme del asunto, o escribo un post, o hago un programa en Internet. Y también levanto la mano, y voto por cosas. Mañana no me quiero ver apurado, trasnochado y con el mismo problema en la Estructura de la U.

Pero, con otro ejemplo redondeo lo que quiero que la gente lea cuando me encuentren por causalidad en Google.

Estaba en la Plaza Barrientos, y corrí por mi moto, y salí, fui el ultimo en hacerlo por la puerta de Barraquilla, porque detrás de mi venía la Protesta.

Dos fotos, y a trabajar.
Mi aporte, informarlo a mis redes sociales, y seguir con la vida. Yo solo había ido a sacar fotocopias, y 900 pesos quedaron en mi bolsillo, y con eso no se compra almuerzo, y si se empeoraba, había que irse en metro.

No es que no queramos, es que estamos en otras cosas. Casi todo el mundo. Muy pocos tienen el tiempo, las ganas, y el intelecto para luchar por causas generales.
Yo las tengo, desafortunadamente (porque se sufre mucho). Pero ya estoy grande, y tengo que ser capaz de educarme a pesar de ser independiente y no tener nada fijo. Y a pesar de mi fragilidad tanto física como mental, escoger este camino de la contravia, de la critica como propuesta, más allá de marchar o de ser activista. Es difícil, pero desde adentro del sistema es que se hacen las revoluciones.

Y yo no me voy a quedar para que los putos Policías me casquen, y me pongan a llorar. Denunciaban que están disparando gases muy fuertes. Que los mejoraron (lo supe la ultima vez), y que están disparando a todo y de frente, y que tiran bombas, y que tiran bolas congeladas de Paitball, y que ellos empiezan. Todas, seguro. Por eso no me quede.

Si me entienden? Hay muchos tipos de estudiantes. Yo soy uno más, con unas características, pero que anda interesado en la lucha, y que no quiere salir con Diploma y ya, porque ando estudiando por placer y por altruismo. Pero no tengo tiempo de ir a la Asamblea. Ojalá transmitieran por cualquier medio las reuniones. Muchos seriamos activos, en la virtualidad.

Y si el problema es de espacios de discusión, y de la apatía, y de la falta de comunicación, el próximo paso de el Movimiento Nacional Estudiantil, debería ser lograr una comunicación clara para el mundo, para TODOS. Así juguemos cartas, un carnaval les cuenta cómo vamos, y los va invitando a entender que en ultimas son cosas bacanas las que se gritan. Y si estamos apurados, una tarjetica como los brujos, y un graffiti, y un poema, y muchas paginas y espacios web, y comitivas para informar que estamos mal a todas parte, todo, y sin parar. Hacer amigos.

Si la gente se enterar de los problemas, seguro estarían con nosotros. Pero la vaina debe salir del la U, y convertirse en tema de moda, de debate, de controversia en la calle.

¿Cómo? No sé, de cualquier forma. Yo hice un programa de Interné. No asistieron los de la Asamblea, pero lo hicimos.


Faltan muchas maneras. Ahí vamos camellandole al asunto. (Tengo que hacer tareas, chao)

martes, 17 de noviembre de 2009

Hoy, todos los radios sueltos

Antes de salir de Medellín la moto quiso ir para el otro lado, yo no la deje.
Con ese antecedente viajamos, nos movimos en el pueblo, y ya regresábamos, tres días después, en plenos 30 grados de Bolombolo, la moto se movía, parecía relinchar. Muy raro.

Pregunte por un taller, y me señalaron una cortina de de esas metálicas, donde se podía leer el nombre del local. Y si se puede leer en la puerta, es que la vaina está cerrada. Me acorde de un taller despuecito de “Pollos Don Mario”, pero creo que solo era Montantas. En fin, a ese fuimos.

Como había dejado de montar en moto, hasta las varadas, los tipos de varadas se me han olvidado. No entendía por qué brincaba la moto.

Solo cuando me dijeron: “Todos los radios están flojos” de una me regrese en el tiempo, Belén Rincón, casa en laberinto, manes súper tesos en la “codalada”, patio bulloso, día de trabajo perdido, esperar, y esperar, y esperar. Eso fue hace algunos años, y la moto era otra.

Ya había botado 4 radios, y se quebró otro a la bajada de la llanta. Entonces, para mayor seguridad, compramos 7 radios.
El tiempo pasaba, y el señor y su asistente iban suave poniendo uno a uno. Hablan de todo, y de nada. Sus temas iban cambiando, a medida que pasaban los carros: “Ahi va tal”, “Esos son los huevos”, “El bus de Jardín”, y así.

A las 5,30 apenas estábamos prendiendo la moto. Íbamos con tiempo, pa´irnos suave, y terminamos pasando la tarde sentado en un acera.

Yo le deje mi billete de 10 mil al mecánico, y le dije “todo bien” al ayudante, y a correr para Medellín, porque mi moto roja no tiene mucha luz que digamos.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Hoy, Chico de mi Barrio

Ya hace días deje de ser adolescente. Hace días. Y por culpa de un parcero y una pagina genial, me encontré de frente con un recuerdo grande de mi infancia,

Hoy, con ustedes, una canción vieja:



Cuarto de Primaria. Profesora que ya se me olvido el nombre (Tal vez, Marleny...). Salón de abajo, en la izquierda, el primero que te encontrabas, porque el otro fue donde estudie primerito. Era la escuela, la famosa ya, Isabel Solis, que tenia una campana que yo quería tocar, una piscina que todos mirábamos con ganas de nadar, y unos actos cívicos donde cantábamos los himnos, y canciones como “La Piragua”, o “Adolescente Tierno”, o “Adiós Chico de Mi barrio”.

La profesora le daba play al casete, y sonaba la canción por los parlantes de la escuela, y nosotros sentados en el pasillo, debajo la campana y al frente de rectoría, y la profe copiando la canción de un tirón con un bolígrafo en unas hojas de un cuaderno grande.

Tal vez lo repetía otra vez, para repasar si no se había olvidado algo.
Luego, con esa melodía de cosas locas, de tiempos que vendrán, de amores que uno nunca veía pues la cara sucia y las ganas de jugar lo impedían, nos sentaba y nos dictaba la canción.
Y nos la aprendimos, tanto, que me la sé de memoria, así me jacte de olvidar todo. Es sino escucharla, y me voy directo a esa silla, y a la ventana y sus hojas de guayabo, y ese barrio tranquilo donde una bicicleta corría, y niñas bonitas con niños felices corriendo la vida, y fumar (así sea un cigarrillo de azúcar)...

La profe supongo yo que estaba enamorada (o desilusionada), y nos estaba advirtiendo que nos iba a pasar lo mismo, y claro, los 80´s se estaban terminando mientras nosotros crecíamos.

El video, gracias al usuario sebu2006 de YT

domingo, 8 de noviembre de 2009

Hoy, El "Algo"

Con estos aguaceros tan horribles, que te obligan a no querer hacer ná, mi hermano entra a la casa con dos paquetes de arepas de chocolo, y un quesito.

Que los “muchachos” nos dan de a una si se las calentamos.

Hoy, calentamos el “algo” del parche de La Mansión de Villa Hermosa.

Hicieron “vaca”, y para el frío y la “come trapo”, que mejor que el Chócolo.
Mientras íbamos y veníamos, las arepas se calentaban, y los datos de seguridad iban saliendo.
“Que esto está caliente”. “Que hay un nuevo man que quiere mandar”, “Que si no se dispara, se rotan los fierros” y así calentamos 10 arepas con quesito.

Mis abuelas nos enseñaron que a eso de las 3pm, se debe parar la vida para comer algo caliente con parva, o lo que te encuentres, pero comer “algo”.
En los barrios de Medallo que te pidan agua, o que te caliente una arepa, es normal.
Mientras los ordenes económicos y de seguridad se mueven y la ciudad crece y se moderniza, todavía por aquí tenemos las tradiciones más clásicas, a pesar de que de las abuelas ni los huesos quedan.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Hoy, un nuevo chuzo

Y hoy, ya bañadito, y con el casco y los guantes puesto, baje en gato de la moto, y al intentar retrocederla para sacarla de casa, sentí que no se dejaba. Mire la llanta trasera, y estaba desinflada.

Maldije, miré el reloj: 6,05am. Tenia clase, dizque debate a las 6,10am. Me abrigue con la bufanda, y baje masomenos corriendo hasta la U.

Hacia días no caminaba. Me gusta caminar, pero no me gusta tener hambre a las 8am, y tener que esperar el bus rojo que dice “Villa Hermosa”, y esperar que de vueltas bobas, y bajarse lejos de casa.

Hoy, regrese a casa, y le saque otro chuzo a la llanta trasera de la moto roja.

Un hueso clavado en la llanta. Eso es estar muy de malas.
Ya van 4 varadas, y ya es hora de ir comprando llanta, y rezar más.

Mi hermano, que ese día se encarto con la moto, me dijo que tenia dos chuzos diferentes, pero pequeños.

Van perdonando todos estos post de motoneto, pero qué se le puede hacer a una cosa tan reiterada, y ya parece mala leche con este pobre muchacho?

¡Nada!

martes, 3 de noviembre de 2009

Hoy, La pose con el trapo

Parce, nos va a tomar una foto”.

Es una de las frases que más me gustan.

Les hice todas las tomas, y les pase la cámara, y hasta saque la mía y les dije que si podía tomarles fotos, y me dijeron otra de las respuestas que más me gusta: “Hágale, todo bien!”

Mientras los encuadraba, por mi mente pasaron los recuerdos cuando fui Sureño (Barrista del Nacional), y posábamos con el trapo a la única cámara (de rollo) que teníamos en esa época.
Siempre que lo hacíamos, era porque teníamos una fecha especial (Los de la foto, 1 años de su propia revista), o porque esa misma semana había un partido importante (los de la foto, está semana hay partido con el DIM), o porque habíamos hecho el trapo.

Subir la foto a internet, tener tan siquiera un blog o pagina gratis, estar borrachos durante una semana, y trasnochar para pintar una tela que diga alguna frase que nos represente, era todo un sacrificio.

Bueno, también hubo locura, pero sobre todo, esa pasión que tenés por un deporte representado en un equipo que esta en un territorio, y hacerlo al lado de amigos, te lleva a realizar sacrificios, locuras, bobadas, estupideces, y hasta vainas bonitas.

Cuando se estaban yendo, uno de los grandes me toco el hombro y me dijo que “cuidado con las caras”. Yo ahí mismo pensé en los días que fotos nos llevaron a encontrar enemigos, y fotos que nos hicieron reconocer a amigos.
No creo que la gente que visite este blog haga algo con la foto de un combo de pelaos que estudia, y que sacan tiempo para formar un parche de amigos que alientan a un equipo (que por estos días no juega a nada).

domingo, 1 de noviembre de 2009

Hoy, romper vidrios

Estaba entrando la moto, y mire para atrás, y un niño le puso conversa a mi hermano. Yo entre la moto, y mi hermano cerrando puerta y descargando me dijo que habían quebrado un vidrio.

“Ahí echandome la murga, dizque un niño que paso quebró el vidrio. Que no es de por aquí”.

Fui a la pieza, encendí el bombillo, y vi los vidrios en el suelo

Espere hasta el otro día para tomar las fotos del vidrio y la ventana, pero salí en la madrugada, pero cuando regrese, mi hermano me recibió con la noticia que había quebrado otro.

El balón queda en manos de esta casa, y sabemos exactamente que estas ventanas son un objetivo muy apetecido, pero nunca pensamos que los chinos iban a quebrar dos vidrios, y los adultos (hasta la fecha) ninguno. Ya nos lo habían advertido, ya lo esperábamos. No sé si lo pagaremos, eso no sé.
Devolvimos el balón, con el grito de “no volverlo a hacer”, de lo contrario, “lo pagan”. Tal y como nos habían dicho toda la vida todos los “gruñones” que nos rajaban los balones y llamaban a la policía. Ya somos grandes, ya estamos de este lado de la película.

Cuando en San Judas quebrabamos un vidrio, corríamos hasta la esquina, y allá discutíamos quién se haría responsable o si no había que pararle bolas o si teniamos que ponerle más cuidado en la próxima. Siempre odiábamos al que rajaba el balón, o nos echaba a los “tombos”, y luego le dábamos con más ganas a la pared donde estaba el enfermo, o en la parte del garaje que hacia más bulla, o a la columna que sabíamos que tenia una repisa llena de cerámicas.

Entendemos a los niños, por eso les jugamos con la estrategia más efectiva, no siendo chévere con ellos: No darles agua, ni ponerles conversa, ni respondeles las preguntas.... no pararles bolas hasta que no se pongan serios y dejen de poner los vidrios de malla.