Y en una vuelta por la U de A, ahí en el corredor de la cafetería de Artes, cogí el libro, mire que no le faltaran hojas, por lo menos que el final estuviese. Le pregunte al parcero, me dijo que 1000 pesos, y le di el billete envejecido por el uso, y éste fin de semana de mucha locha, digo, de descanso pedido a gritos, me encontré la historia tal y como la deje en la infancia, en un libro que mi mamá tenia en una mesa, como tarea de español en clases de la nocturna, yo tengo otro que ha pasado por muchas madres e hijos.
"María", de Jorge Isaac. Romanticona, descriptiva de paisajes peculiares, de amores que no creo, pero sé que así eran. Llevo dos días, y me lo leí despacio, despues de visitar la casa donde Jorge Isaac vivió y averme ventiado en el Valle del Cauca, fuí pensando las palabras y miradas que lo son todo, en la historia de amor de María y Efraín.
Y yo que perdí, por la timidez, el talento de las miradas, y de las palabras susurradas, y solo me quede con la habilidad de hablar como niño, en fin.
Los mares que separan amores, y corazones que no resisten. Cartas con pétalos, que ya por mail no tienen gracia.
Mañana más historias que entran y salen, que se olvidan como excusa para luego recordarlas.
Nos trasladamos
Hace 12 años
1 comentario:
EL otro día decía y te decía que Maria es un amor de esas epocas, donde el email y chat no existían no para reemplazar la distancia sino para reducir la fatalidad. La fatalidad por la que Maria, murió, o mas bien sobre el morir de amor de Maria (y José Asusnción Silva...y otros autores e historias) y muchas otras historias de esos años de distancias irremediables.
Ya casi no me acuerdo de María, pero si me acuerdo que lo leí y que me gustó. Ante la incapacidad moderna de morir de amor, es bonita una historia que soñó esos amores difíciles.
Bonito que lo hayas leído.
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