miércoles, 31 de agosto de 2011

Llevo días evitando escribir (Julio 6 del 2011)

No porque no tenga nada, al contrario, una vida tan regular, tan de mierda, nunca le faltan aventuras y desastres. Cuando me vuelvan las ganas escribo todo el prontuario de miles de cosas buenas y malas que me han pasado.
Pero no escribo, para evitar un mar de lágrimas, un texto triste de más, unas ganas enormes de darme por vencido en un mundo de ganadores...

Tengo las fuerzas destrozadas, y para no sobreactuarme, me drogo hasta que ya no pueda caminar. Es una estrategia que recomiendo no hagan en casa.

Lo único que quiero por estos días de soledad y silencio, y golpes bajos y altos, y angustias monetarias, y desinfles empresariales, en fin, lo único que quiero es no tener tantos gatos, que ojala se mueran todos de una vez, y yo pueda vender las dos cosas adicionales que tengo que me encartan, y largarme a cualquier paraje desolado, a estar como estoy hoy: solo, triste, callado, humillado, angustiado, y desilusionado. No tiene sentido sacarle chispas a la vida, hacer grandes proyectos, soñar pa´futuro, si tienes la misma vida de un zapatero, o cogedor de café, o campesino coge papas que no ha estudiado, viajado, emprendido... una vida sencilla de una vez pues!

Obvio, la inercia pusilánime de traerle comida a los 8 gatos, limpiar la mierda, hacerme una arepa y un pan para tragarme, destender y tender la cama, ir y volver con una gasolina carisima y una moto ya destartalada, trabajar inventandome bobadas en medio de cosas serias, pedir la ración del día, acostarme en un colchón sin sabanas en un habitación que se inunda cada vez que llueve, y levantarme y mirarme al espejo y decirle: “Juan, qué carita tenés guevón!”, y revisar twitter, y meterme al baño, y desayunar con cualquier pan que alcance con las monedas que tengo, y leer noticias, y fumarme un porro, y otro, y escribir y escribir, y bueno, ahí me voy entreteniendo, y cuando menos pienso, he creado otro proyecto o tengo otra idea para adicionarle a los días de mierda, y así me voy yendo, siendo de veras un poeta maldito, no por mi métrica y palabras, sino porque hago de la mala vida un poema largo largo que nadie escucha pero que es lindo en ultimas.

jueves, 18 de agosto de 2011

El Che Guerrilla, Parte 2

De primerazo, hay que verse la parte uno... algún día de estos.



Un película que se la echó al hombro Benicio del Toro (en plata e idiologicamente¿?), que con una puesta en escena en serio(¿?) del mundo narrado por el diario del Che Guevara que hace poco me leí. La vida se va entrelazando.

Planos generales, silencio, música, momentos, vida guerrillera, día a día, fotograma a fotograma de lo que uno se imaginó cuando leyó el diario. Así no más. No más.
Hay que entender que yo veo la película “El Che Guerrilla” con ojos de Colombiano, que desde que nací, y generaciones anteriores a mí, estamos metidos (para perder siempre) en la guerra.
Algunos ni aguantaran 10 minutos de película. La lucha armada en estos lados es apología al terrorismo, y el Che como Símbolo, lo reseñé en Todo Lo Que Hay cuando vi que iban a sacar otro diario de la lucha en Sierra Mastra, aquí en Colombia es ser guerrillero o de izquierda y eso es marcado para la muerte.

Y Che Guerrilla, parte 2, es una película panfletaria, de los diarios de un guerrero extremista. Pero eso es en otros países, no digo ni diré que civilizados, eso nunca, pero ven el mundo con otros ojos. Muchos actores reconocidos aparecieron en escena. Muchas estrellas para una película B (o C, si eso existe) que no sé por qué estaba en un videotienda colombiana de un pueblo campesino. O tal vez si: Que aquí vemos la lucha armada, la vivimos, la comparamos con Rambo y vietnam y todo eso, y la alquilamos un domingo para verla, e imaginarnos que están que cogen a Cano (el duro de las Farc, y ya han matado a otros "duros") cómo es la vida cuando le “respiran en la nuca”?, cuando te matan amigos y te dejan sin provisiones y el pueblo por el que dizque luchas no responde?, y con el tiempo las cosas se vuelven peores y a veces es inútil tu revolución y tus ideas?

Ataques guerrillas, que se usan cuando uno es menos que el otro. Es volverse uno con la naturaleza. Es elegir morir, para ser virus que ataca. Es lo que ahora algunos hacen en la era digital: revolución. Acción para un mundo en reacción.
No digo que no estoy de acuerdo, o no. Yo, que soy un problemón social y político, que soy un intelectual vago, un revolucionario sedentario, un pacifista como visión general del mundo, digo que esa lucha la alquilo en la videotienda para entender alguna parte de la historia armada y radical de las búsquedas por un mundo mejor, la vida de un man que es símbolo en el mundo (del tercer mundo para el mundo!), la paciencia absurda de algunos, como dijo una guerrillera un alemán mientras “ veía” con los oídos pasar un avión: “Aquí podemos durar cuarenta años más jugando al gato y al ratón”.
Como los vietcom que hicieron túneles mientras perdían la guerra y las vidas por debajo de sus enemigos, y los atacaron cuando estaban celebrando.
Como las hormigas de mi terraza que esperan que yo algún día me descuide con un mecato y me pare por un instante, ahí mismo atacan y se lo devoran.

Claro, siempre lo matan a uno, el humano llega y te mata con su palma grande, o caes porque caes (Osama bin laden), porque ese es el juego de la guerra: matarse unos a otros mientras pocos disfrutan de lo que a muchos les falta.

Y de verdad, una historia medio atropellada que cuentan en Universo Centro, reflejan lo pobre y absurda que es la guerra, armada, que en ultimas es lo que uno lee en el diario, una vida de mierda en las montañas, viviendo mal, todo, para ser una puesta en escena más de un mundo moderno de barbaridades.

martes, 16 de agosto de 2011

no diga que son un unos hifueputas, diga, son unos hifueputicas

Lo peor que le pudo pasar a la "era de la información", es la autocensura. Ya sea por el miedo, la protección de su privacidad, el cuidado de su empleo, o porque les da la gana. Pero la promesa era que íbamos a vivir un tiempo de mucho conocimiento acumulado miles de años, y llegaría vía directa al futuro.

Cómo vamos a formar una sociedad, si en su peor crisis moral, económica, política, social, y cultural, los medios de comunicación, la vía de unión entre extremos, se ha vendido al mejor postor. O al menos cruel. O al más bonito.

Y los jóvenes de hoy, los que ayer nos prometieron que eramos el futuro, hoy, estamos acomodiditos en nuestros cajoncito de protección: la oficina (el cubículo), el ascensor, el carro, la portería, o el bar, o la cafetería, o el supermercado, y después los pasillos, mi casita, el cuarto, yo.
Puras cajitas, cuadrados, rectángulos, esferas, círculos, en ultimas: cuevas. Ahí estamos, como en el mito de Platón, el de la cavena: asustados por las sombras que proyecta la vida afuera, allá, después de la cajita o el huequito donde estoy cómodo y feliz, amarrados y anclados, pero tranquilos y con mucha esperanza de seguir así, ni peor ni mejor, sólo así, no salen, y el que salga lo llaman loco (si es que vuelve), o desgraciado y traidor (si no regresa).

La única habilidad que tengo, a demás de mucho corazón, es eso, salir de la caverna, enfrentar el mundo, sentirlo, mirarlo desde otro punto de vista, sobre todo desde el suelo. Y bueno, mi idea es contarle a todos, que hay otra vida, otras formas de existir, y sé que no es fácil, pero tampoco creí que fuera tan despiadado y penosos los reclamos por ser así.

Desde niño me prometieron que era el futuro, y que mañana la cosa iba a ser mejor. Ni lo uno, y mucho menos lo otro. No quieren soltar el poder de un mundo que en solo tres generaciones (o cuatro o cinco, igual son muy pocas) contaminaron, enfermaron, casi han destruido, Y dos, nada es mejor incluso, si te vas a quejar de que nada esta bien, por favor:

"usa un lenguaje adecuado para hacerlo".
"Busca el momento indicado para decirlo"
"eso no se dice"
"Eso hasta este momento nunca se ha usado"
"por qué no te callas, imbécil!"
"mira el vaso medio lleno, no medio vacío"
"opine de manera constructiva!"
"Sólo diga cosas bonitas".

O sea, opine, pero anonimamente.

estamos peor que ayer, y que antier, así estemos parado en plenos días de la súper tecnología, y las redes sociales, y todas esas mierdas modernas.
Si tan solo haces eso, comunicarte por una red de esas que tanto bombo le dan en los medios manipulados de información, o haces tu propia web, y hasta ahí llegan los que no quieren soltar el mundo, los que lo tiene así a decirte que "te calles!", porque afectas la imagen de tu pareja, de tus amigos, de tu familia, del caserío, del barrio, de la empresa, del equipo de fútbol, del universo. "¡Silencio!"


-Hay que decir las cosas, pero cuando uno tenga el poder.
-cuando es eso?
-lo más probable, que nunca.


La prensa debe ser buena o mala, pero libre (no vi en un documental que ya no sé donde está...)
Este oficio, jovenazo aún, unos siglitos no más, fue libre cuando dejo de amplificar solo lo que quería decir el Rey. Pasquines iban y venían, y causaban estragos. Luego la prensa llegaba con esos estragos cada semana, o día, u hora, y los que hicieron la prensa libre, los comerciantes (que patrocinaban la independencia), siglos después, o sea hoy, hacen lo mismo que le rey: Censuran, suavizan, mienten, desaparecen. "Si no, te echamos", o "te quitamos la pauta". Y obvio, "te mandamos los de la moto".

Hoy, cuando te ofenden y te tratan mal, en vez de responde en las redes sociales, en las paginas web, dar la cara, y con la palabra y los argumentos, dar batalla, no, prefieren llamar a la superior, y como los Reyes, haciendo presión económica y social para que uno no diga nada, en vez de responder alguito.
Somos amigos, pero como amigos también tenemos la opción de criticarnos. Es más, es la mejor critica, porque viene del corazón y del conocimiento. Digo yo al respecto de que un trabajador hable (bien, mal o regular) de su propia empresa. (La corte constitucional ya se pronunció, pero se me perdió el pronunciamiento... seguimos buscando)

Si uno con su terquedad periodística no cambia el mundo. Ellos con su censura tampoco lo tiene controlado.
Por eso les propongo que dejen libre el pensamiento y la opinión, y estemos a la altura de los días de hoy, de la información y del conocimiento, y no sean corbardes y dejen de ser dictadores, pues, su contrato se acabara pronto, su jefe cambiara, vendrán nuevas temporadas. Yo sé que venimos de una dictadura larga, que nos hizo aplaudir lo que no se debe aplaudir, y callar lo que debiamos hablar. Pero es un esfuercito, a ver si el mundo de mierda por lo menos lo podemos ver y oler cómo es.

Y ante eso, seguimos en paro moral, etico, amoroso, sexual... Estoy indignado, y a pesar de todo, de la mierda que es cada vez más señalar cosas obvias, y tengas que pedir perdón por eso, hay que seguir, hay que reaccionar!! Tengo la fe que esta generación mía que no servimos para cambiar nada, sino empeorarlo, reaccione algun día (ojalá pronto), o se muera (ojalá pronto).

"Debajo de la alfombra aparece un suelo corroído que no va a mejorar remendando la alfombra para taparlo mejor" José Luis Sanpedro

miércoles, 3 de agosto de 2011

Comer, rezar y amar

¿Hubó corazones rotos?

De cual matrimonio estamos hablando, del corto? O del largo que no ha pasado?



Rezar

El taxi dio la la vuelta, y no acaté en sacar mi cámara para tomar el registro de ese ultimo momento, irónico, pues, la que se iba (días después) en ese momento se quedaba, y yo que me quedaba, me iba yendo. Esa fue la despedida.

Me quede solo. Me dejaron solo. Me lo merecía. Antes había roto un corazón y había dejado sola a alguien, porque había encontrado mi media naranja. Ahora, mi media naranja, se fue por el mundo, por qué? No había un por qué, por eso se fueron.

He comenzado tantas estregáis, me he prometido tantas cosas, he llorado, reido, dormido, viajado, corrido, no puedo decir que no he intentado otros ojos y corazones (pero nadie me ha gustado) pero tampoco no ha sido una estrategías de desahogo. Nadie me echo, solo se fueron. No me traicionaron, tan solo pidieron un tiempo para saber cosas, para estudiar, para crecer. Igual, dañaron la magia, rompieron la unión, no separamos...

Del primer “matrimonio”, ese donde rompí un corazón, aun hoy en cada instante, al recordar su nombre y recordar los momentos, mando mucho amor a lo lejos y espero que tengan una linda vida. Rezo por ella, aunque lo mio no sea rezar u orar, ni meditar. Pero esta en mis buenas energías, en mis peticiones. Todavía me culpo. Pero no había qué hacer. Eramos muy jóvenes, desordenados, sintonizados en emisoras diferentes. Yo no la entendí, ella no me entendió, pero nos quisimos. Habíamos podido estar juntos toda la vida, así fuéramos infelices y no compatibles, y así, a golpe de sexo y cotidianidad, hubiésemos alcanzado la felicidad. Se lo dije al oído: “podemos vivir toda la vida, el amor nos sostiene, pero el resto de los minutos del día que no tengan que ver con el amor? Lo pasaríamos mal”.
Tuvimos un final malisímo. Doloroso, y penoso.
No fui capaz de tener sexo por meses. Tuve un hueco en el alma por muchos días. El tiempo, y el amor que inmeditamente fue recibido, sanaron las cicatrices.

Ahora, después del taxi, de las estrategias, de verme encerrado en mi mismo, en mi vida que no da muchas opciones distintas a distraerme trabajando para no pensar, para no sentir, para no tener que conseguir amigos y salir a conseguir otra chica que complete la naranja o llene el vacío gigante que vuelvo a tener en el cuerpo, y bueno, ahora, he aprendido a perdonar, a escuchar, a entender, a perder, a cerrar, a callar. Lo que no aprendo es a olvidar, cosa complicada.
He tapado, he sobado, he pedido perdón. La vida no me la pone fácil. Me da palazos en la cotidianidad, y tengo que librarme de las tormentas y los golpes externos, mientras adentro cicatrizo. Ha sido un año, masomenos, de dolor y furia y venganza y estupides y tristeza y angustia y soledad mucha soledad y desinfles y días malos y otros más malos aún... Ha sido una prueba, creo, ya superada. No fuí a ningún templo, no escogí a ningún dios. Solo acudí a algunos que han caminado la soledad y el dolor de este mundo, creyendo en el hombre, en lo bonito de los otros, en las sonrisas y las fuerzas que veo y hago mías. Solo fueron libros, y algunos buenos pocos amigos que me clavaron la mirada y la palabra que era.

No lo niego, estoy agotado, pero ya logre salir a flote, y no me voy a hundir más. Merezco saber nadar. Y en esas estamos.

Comer

Lloré a toda velocidad en la moto.
Me embutí toda la droga que pude.
Huí de la gente.
No volví a cocinar.
No he cuidado mi aspecto.
Hice caso omiso a las reglas básicas de la amistad.
He comido mal.
He soñado maluco.
Me he masturbado casi todos los días.
Perdí la cuenta de cuantas vidas he planeado.
Viaje lejos y con una extraña.
Me interne en las montañas con mis gatos.
Viaje por todo el país durmiendo mal y enfermandome con todos los climas.
Camine las calles solo, rumbo a ningún lado.
He comido en cada tienda, en cada negocio, y por mi aspecto, me han atendido mal.
A veces intento hacer cosas que no hacia nunca y he fracasado.
Escribí todo el dolor.
Maldije los días.
Salí a montar en bici.
Escuche a los italianos hablar, y me dieron ganas de aprender a parlar Italiano!! con las manos y todo.
Hago 20 minutos de ejercicios algunas noches.
He vomitado en diversos baños, y la astucia para ocultar los sonidos ha sido la misma de siempre.
Tantas estrellas en el firmamentos como chococonos me he comido.
La moto, la moto, tantas rutas y kilómetros de pura fuga.
Ya dije que he llorado? Caminando, al borde de la cama, mientras hago cámara,en un murito... soy un llorón.
Horas y horas mirando la gente, comparandome, comparandolos.
Minutos viendo fotos y leyendo textos de alguien que anda comiendo y sacandose rollitos y buscando amigos y estando en fiestas y viajando el mundo.
Me he prometido quedarme aquí, sabiendo que el “aquí” nunca sé donde es.
Escuche dos misas seguidas, y cogí la costumbre de agradecer antes/durante/después de comer hasta el primer campesino cultivo lo que me como.
Me echo 5 cobijas, y a veces echo candado a la puerta, y uso bufanda y guantes.
Confieso que de vez en cuando abro la única pagina de porno que sé y no tiene virus, y me aburro ligero, pero salgo satisfecho.
Aprendí a quedarme los viernes en la ciudad, y de vez en cuando animarme a ir a tomar una birra y devolverme para la casa a dormir solo.

He tratado de divertirme. No tenia alternativa.

Amar

Cuando veo a esa persona que le rompí el corazón besándose con otra persona, me pongo feliz, así me incomode el show exhibicionista que trata de hacer para que yo vea. Eso es muestra que volvieron a creer en el amor, y que andan felices.

Ahora, que estoy en paz conmigo mismo, y recuperando terreno perdido en este año de luchas, es tiempo de volver a amar.
Todo lo que pasa, es incontrolable. Lo sé. Hay una fuerza superior que lo maneja, eso que llaman Dios, destino, suerte, llamenlo como quiera.

Estuve pendiente, a cualquier señal que me diera a entender que ya se habían enamorado mientras viajaban. Si uno se pone a leer señales, y quiere leer, hasta las lee. Fue, a veces, un martirio. Martirio viene de martilleo?

Esta es la hora, 2,20am, de un 6 de junio, que estoy listo para el amor, hay que intentarlo, con miedo, con un pavor a que del otro lado no haya respuesta o amor o tiempo o...

Con los días, estos últimos que han sido buenos, fui llenado la lancha de cosas que necesito para ofrecerle a la mujer de mi vida el viaje hacia el paraíso de todos los días a todas horas en todos los ánimos y en cada circunstancia.
Mientras ella se decide, o yo la encuentro, o la busco, o la traigan los vientos, veo al horizonte opaco de los días grises, y de los soleados también, y me digo: “hay que estar a flote. Ya te perdonaste. Ya aprendiste a pasar los días sin pedir permiso o dependiendo de otro o necesitando compañía y ayuda. No te puedes hundir, lo peor ya ha pasado”.

Mi película, aun no ha terminado.



Posdata: Me cae remal Julia Roberts. Sin ella, la película hubiera podido ser mejor.