martes, 23 de octubre de 2007

"En busca de choques en estéticas audiovisuales Nº II"

Yo, Juan David Escobar, que tengo como únicas labores: el incomodar, el preguntar y, por supuesto, el meterme en lo que no me importa. Que me da rabia y provoco. Estorbo. Y pienso. Y nada más.

Y tal vez paro. Espero. Aguanto.

Y paro cuando no entiendo. Cuando al otro lado me dicen que se acabo, ¿acabo qué? Para acabar es necesario iniciar.

Porque decirme que no entiendo, que no te entiendo en una discusión en donde estoy metido hasta los tuétanos: en hacer imágenes en movimiento. ¡Qué tal!

Yo no discuto semántica, ni lingüística, ni mis textos contra los tuyos. Ahí siempre pierdo. Yo hago imágenes. Yo no escribo. Hablar desde la posición de críticos, desde la posición de la ilusión, hasta donde alcancen las palabras, hasta donde las habilidades literarias permitan llegar; esos “polvos” metales, son muy fáciles, y muy divertidos y obligatorios. Y yo no quiero eso, a demás ni lo sé hacer.

Para llegar a cualquier entereza hay que ser lo que se es. Enorgullecerse de sus limitaciones. No pensar en la fama, es mejor ser una estrella sin darse cuenta. No hablar, hacer.

Yo propongo una vaina ¿Qué quieres hacer en video? ¿Decime un video clip ideal? Y te lo hago.

¿La plata? ¿Cuánto se tiene? ¿Hay límites con ese detalle, tenemos problemas para ser Simon brand o quien más…U Oscar Azula? …¿el problema es el dinero?

Porque eso también entiendo (o tal vez no) de tus imaginarios, esos sueños son los sueños de una generación (la nuestra) de imaginarnos en otros lados, en colores de otras partes, sacar emociones propias de un video que vi, de una imagen que recuerdo. De las rayas estéticas y vitales que nos provoco crecer viendo a Robocop o Rambo, y al mismo tiempo, la muerte del mejor parcero en vivo y en directo en la esquina de la cuadra. Es un viaje hacia otro lado, menos aquí, menos a un espejo y un ambiente parecido a nosotros mismos.

Eso quiero discutir. Lo otro, ya se discutió, o se lleva años en el mismo punto. Ahora, toca entrar en acción.

Yo por ejemplo, hago todos los días los sueños que tengo en las noches. Los sueños y las pesadillas las vomito en imágenes asépticas, filtradas para que lleguen a la gente. Los límites de mis “artistadas” son los límites míos. Si tengo una cámara de cine y un luminotécnico, y una “chimba”, y una bañera, un tráiler lleno de cosas más, yo hago lo que quieras. Hasta llego a esos sueños tuyos. Lo que te imagines, del color que te imagines. Por ahora me fascinan los sueños míos, los que hago ahora mismo.

No se puede esperar la fama y a la vez la entereza, porque ambas se empujan. Son torpes y enemigas. Una es silencio y la otra algarabía.

Estoy convencido que el mundo está cambiando para nuestros intereses, para darle espacio a nuestra ideas, a nuestras imágenes y ritmos. Los astros están a punto de confluir. No sé cuando, tal vez en unos años, en una década. Tal vez sea nuestros nietos (¿nietos?) los que entiendan y respeten nuestros trabajos. Tal vez MTV los pase como especial de la semana. Lo que pasa, es que por ahora, no pasa nada, no tenemos respuesta instantánea. Y eso desespera.

Entonces, comenzamos a acomodarnos, a acomodar nuestras palabras, a ofender a los enemigos y a la vez tratándolos de convencer, a soñar con los flashes siendo una banda de culto. A olvidar los vómitos de quienes les hacen el video, les ponen imágenes a sus videos. Tal vez (y hablo por mí, y no por Punto Link) que vamos por rumbos diferentes, queriendo ver otros horizontes. Imaginándonos cosas opuestas. O las mismas, pero añorando diferentes triunfos.

Eso no es ni malo ni bueno, ni contradictorio. Me gusta, lo necesito. Pero me da rabia que venga de Juan Suarez, en donde la acción ha estado algo escasa, y muchas veces con falta de asistencia.

martes, 16 de octubre de 2007

Hay cosas que no entiendo.

Hablando de política y arte.

Esta semana el político Luis Pérez Gutiérrez, conocido en toda la ciudad como Lupe, ofreció (sin estar presente) un espectáculo humorístico. Yo insisto, los políticos son muy chistosos, llegan muchas veces hasta el ridículo. Pero hay trabajos que alguien los tiene que hacer, y ellos, supongo, lo hacen con lujos de detalles.

El señor estaba invitado al programa de tv Mesa de Noche, que transmiten el canal caracol en la madrugada. La invitación incluía: silla, vaso con agua, tiempo y debate con su más próximo contendor: Alonso Salazar. La dinámica del programa consistía en un cara a cara, y una que otra pregunta de Jorgito y del otro señor que parece dormido.

¡Y éste man no va! Ya había quedado mal al programa una vez, y a la ciudad de Medellín, muchas veces. No sé porque me sorprendo. Este tipo de personas siempre evitan hablar con alguien que los confronte, con alguien con un poquito de cerebro. Es miedo. Fisico miedo.

Jorge Alfredo V. arranca el programa explicando, y se le veía la piedra, porque la silla de Luis Pérez estaba vacía. Y la cosa estaba tan chistosa que le hacían plano medio a la silla vacía, y sacaban las cartas que Lupe había mandado. La primera carta era para comunicarle a la producción y al canal, qué gracias, pero que no puede ir, que tiene una manifestación popular, y que el pueblo llama. Y Alonso Salazar ya preparando sus argumentos a 2600 metros más cerca de las estrellas (argumentos que a veces son muy pobres). Cuenta Jorgito que hablo con lupe por celu, y le dijo que como así que no puede? que ellos, Jorge y Luis, habían quedado en una hora y día para grabar el programa. Lupe dice que lo va a pensar.

Ya en la tarde, la maquinaria de todos con Luis Pérez se enteran que van a grabar el programa de todas formas. Y llega la segunda carta al programa. Que decía en resumidas cuentas, que a ellos, a los lupistas, les parecía el colmo que excluyeran al candidato líder en encuestas por petición de su rival. ¿Qué cómo hacia un canal tan serio para prestarse a un juego tan sucio?

No da sino risa. Es humor puro: La contradicción y el cinismo.

Y claro, lo volvieron a llamar, y sorprendido dijo, que como así? que no habían quedado que a él lo graban a través del microondas?

Pues nada, la producción decidió grabar sin su esbelta figura. Silla vacía y oportunidad para que luciera el otro candidato.

Hay una raza de gente que no le da pena nada. Que no tienen vergüenza. Ofenden y golpean e inmediatamente desaparecen. Lupe lo hace de un día para otro, y otros que conozco, lo hacen por meses, e incluso años. Son de lo peor.

jueves, 11 de octubre de 2007

En busca de choques en estéticas audiovisuales

Un manifiesto de Aviones

http://www.myspace.com/aviones

Radiohead dice "Comerciales para televisión". Esto implica un producto, un medio de difusión, un mercado, inevitablemente un consumidor.

Pero ¿qué pasa con las bandas, músicos, que no cuentan con un mercado? ¿cuál es el objetivo que tienen (tenemos) para hacer un videoclip? Esta claro que no es la difusión. No alcanzamos un mayor número de seguidores, fans, padrinos, dolientes, seguidores con este medio. No hay una mayor comercialización de nuestra música. En ciudades como la nuestra (Medellín), destinos intermedios, no se consume rock local, es más, dudo que esa palabra exista en nuestro vocabulario. Hay un solo canal con un solo programa en donde pasan rock local, videos locales. Y en su mayor día de sintonía contó con 5.000 espectadores (eso dicen las malas lenguas). Y bueno contando con la densa población de bandas de nuestra ciudad, este programa, que ahora es de 2 horas a la semana, no da abasto. Esto sin contar con lo demás, el testeo y prueba de calidad, contenido y gusto (si es que se puede llamar así) que es el tamiz de cualquier programa.

Aunque también se puede aspirar a MTV. Mentiras nuestros presupuestos aun no alcanzan el color MTV. Videos limpios, relucientes y asépticos, parecen salidos de hospitales de desinfección audiovisual. Como tiene que ser, imágenes limpias para un mensaje limpio. Y no reconocer que esa imagen es seductora es no reconocer nuestra pobreza. Sé de antemano que ese color es el objetivo. Lo digo mirando los videos de Aviones que son sucios y en la comparación terminan siempre perdiendo. Tal vez el problema del videoclip en Colombia se reduzca al problema del cine en Colombia y es que esta lleno de buenas intenciones. No todos tenemos a Simón Brand o a Oscar Azula o a los creativos de RCN al frente de nuestros proyectos audiovisuales. Tal vez estemos acostumbrados a pensar que lo que hacemos es lo mejor que podemos hacer y que todos nuestros errores técnicos son previsibles y perdonables. Aunque no quedo satisfecho ya que estaría condenando nuestros deseos a la mediocridad de ser una ciudad de destino intermedio. Ideas pequeñas producidas por gente pequeña para gente pequeña de un país que no importa. Y no, esto tampoco es cierto. Lo que queda claro, indiscutiblemente, es que el color MTV es el que pega (aunque si podemos discutir sobre la música, pero esto es otra cosa). También podemos acusarnos de esteticismos tontos, artistadas en el mejor de los casos, que no siempre terminan en un buen lugar.

De nuevo. Me encanta Nick Cave y sus videos hacen que me guste más. Nunca he visto un video de Nick Cave en televisión, ergo sus videos no son comerciales para televisión, o si lo son, Nick Cave tiene un muy mal publicista. Ni siquiera en programas de video de carácter cultural. Dudo que Santiago sepa quien es. Juliana Mejía dice que puede ser que Nick Cave tiene un público objetivo bien cerrado. Esto en el mejor de los casos (o simplemente es otra opción, dice). Es que Nick Cave es el ejemplo perfecto. Caminando por un centro comercial de mi ciudad en donde venden videos piratas (si, es América Latina, todo se piratea) encontré un recopilatorio de sus videos en dvd y me lo compré. Fue la única forma de ver (ahora es más fácil vía youtube) Into My Arms (poesía audiovisual en blanco y negro), Henry Lee (fondo verde chroma, aparece totalmente hermosa PJ Harvey y uno lo siente en el aire), (Are You) The One That I've Been Waiting For? (la luz, el color y Blixa Bargeld cruzado de brazos al fondo a la izquierda), Stagger Lee (ya quisiera uno un escenario así), Love Letter (y no hay nada más que decir). Tal vez fueron los videos de Nick Cave los que me ayudaron a encontrar la respuesta.

Sí. En nuestras condiciones nuestros videos deben ser preciosas obras de arte directamente relacionadas con la música. Si no tenemos un público, ni una disquera, ni ningún compromiso más allá de nuestro hacer, los videos que produzcamos no tienen un fin comercial sino artístico. Sí, es cierto que aparecer en MTV seria fantástico, pero no sé a que horas podría ser visible en su programación "Quedarme atrás", nuestro último video, ¿a las 3:00am? y ¿para qué? ¿Para decir que nos están rotando en MTV? no vale la pena. No voy a decir que no al mercado, que eso es venderse, que no traicionaría mis principios. Pero ya quisiera uno, llegado el momento, tener la entereza de Café Tacuva. Eso es todo.

Si los videos son comerciales para televisión, los de Aviones son muy malos o nuestro publicista es un fraude. Simplemente hemos permitido que pongan imágenes a nuestros sonidos. Eso es todo.

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Leí el texto, y me dieron ganas de vomitar, sentí como asco. Y comencé a pensar en varias frases de un libro que estoy queriendo cada día más, y que ahora, hacen parte de mis gritos de batalla, esas líneas que me repito antes de hablar, o de darle Rec a una cámara, o en la mañana cuando mi pie toca el piso frio, o cuando no tengo fuerzas suficientes para dar el próximo paso:

“ya somos todo aquello contra lo que luchamos a los veinte” (José Emilio Pacheco).

“Me doy cuenta de que estoy empezando a olvidar lo que sentía cuando era más joven” (Douglas coupland)

“Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lagrimas en la lluvia” (Roy Batty)

“Los sueños que no se adaptan a las circunstancias no son sueños, se llaman anuncios” (Ray loriga)

Tal vez la rabia sea la típica respuesta de un niño. Y sí, lo es. Lo es.

Le escribo a Jorge Serna por el chat, que qué tal, ese man lleno de rabia!!

Y Jorge me responde:

r/ Jorge: Me parece (demasiado) honesto. Y no tiene (mucha) mala fe. *

*no son las líneas exactas, se me borro el chat. Porque en Latinoamérica además de piratear se cae el internet. Pero esa es la esencia de la respuesta.

Después de la rabia y la pataleta, viene la risa. Es que los señores que me enseñaron a querer y emocionarme, los que hablaban de la estética callejera y punkera, y etc, etc y largos etc´s: Juan Suarez y Jorge Serna, ahora opinen firmemente desde la otra orilla (muy en la otra orilla). Bueno, simplemente, ya crecieron. A claro que Jorge no piensa como Juan, Jorge esta como en el centro conteniendo de ambas (Jorge sabe que me gusta su mirada); pero que están en la otra orilla, están. Y en este mundo se necesita gente adulta, como ellos, y gente joven, como yo. Un equilibrio. Lo que llaman ser profesionales.

Ahora, sentémonos a esperar los dólares y la fama (el orden de los factores no altera el resultado).

Pero me gusta, me gusta que piensen así.

Otra cosa:

Supongo que alguien alzo la voz proclamando el fin del mundo y el encuentro del cielo en una pieza musical o en un video por allá en los incipientes y no muy prometedores inicios de mtv, en eso años ochentas tan detestables y mañes, pero también bellamente románticos.

Cada segundo tiene una belleza momentánea, una belleza más parecida a una mentira venida de residuos que nos ha dejado esta generación que busca ver un aviso electrónico la hora y olvidarse de su mundo, o “leer” una revista para hombres, para no ver su propio sexo. La idea es buscar a Dios en otro lado, en los misterios de lo aséptico y no en la limpieza de la mugre. No fuimos capaces de halar el gatillo pero cada segundo nos drogamos con cielos y bellezas. Queremos olvidar el aire que respiramos y el color de nuestro ambiente. Tantos esfuerzos para crear mundos ridículos, imágenes “Fantásticamente bellas”, cosas irreales…

Tal vez suene, y Juan lo dice, a creer y aferrarse ( y acostumbrase) a los errores, y así convertirlos en estéticas perdonables. Tal vez sí, pero ese es nuestro horizonte. Si no lo crees, ¿dime que ves cuando te montas en el transporte, cuando miras y no te has puesto el walkman? ¿Qué ves cuando te toca esperar en una acera mientras mengua la lluvia? ¿Qué ves cuando no encuentras taxi y te toca buscarlo en otra calle distinta a la tuya?

Cada ser humano se compara con otro, con alguien de otro lado. Discute y envidia a ese que con quien no puede dialogar. Cree en otro, y lo convierte en el salvador, y ese otro, busca hacia acá, hacia un lugar que no conoce, donde gente pequeña que ve el mundo desde abajo. Inversiones de sueños, buscamos complementos odiándonos a nosotros mismos. Tal vez esta sea un sentido de la globalización y la modernidad.

viernes, 5 de octubre de 2007

Una escena típica

Bajaba para el metro. El niño que iba delante de mí llevaba un morral transparente, con una sombrilla en su interior. Pero supongo que iba lleno con muchas cosas más, pero yo, ni mi cámara, alcanzamos a ver nada.