sábado, 8 de octubre de 2011

Precious

a veces me gustaría estar muerta!
Supongo que voy a estar bien, porque miro al cielo
”.

Está peli es para los que esperan los nuevos días.



Al carajo con el otro día!”

Llegué tarde a la moda de Precious, pero sí, los que sufrimos (así se aun tantico) como #precious, los que nos sentimos como un pedazo de carne negra o blanca (y demás colores) ahí que engorda (o enflaquece) viendo shows de tv donde te muestran la mierda que nunca serás, y no más.

Dice en algún pasaje: “hablan como los canales que yo no veo...

Precious es preciosa.
Porque sospecha que viendo esos canales su hijo será alguien, alguien inteligente y mejor.

Una película para los que estamos en el túnel siempre, llenos de luz pero ahogandonos con ella, y cuando salimos, iluminamos. Para ese tipo de personas es Precious.

El amor no hizó nada por mí”.

Una historia brutal, para todas la chicas preciosas que hay en el mundo, que quieren otro mundo y ser otras personas, pero no les queda de otra sino ser fuertes y ellas mismas, porque el mundo las golpea, las viola, las vuelve sopita.

A demás, muy preciosa la película, el ritmo, la textura, la mirada, el hablar de los negros así, sin suavizar, de hablar de ser brutos y pobres y de malas así, cruel, porque preciosa es la vida hija de puta Jones.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Has dado en el clavo con esta película verdaderamente "preciosa", amigo Reticente...Es la realidad de un gringolandia que todavía sigue muy segregado y poco visto/debatido en los medios (o en las películas) pese a tener un presidente negro (todavía vigente). Además de ser una historia brutal para todas las chicas preciosas que quieren otro mundo y ser otras personas, como has describiste tú tan atinadamente, es una historia desgarradora que muestra, a través de esta protagonista entrañable, todo lo que esa gente tiene que soportar cada día en la tierra de los sueños. Pero también se puede apreciar la vitalidad, la fuerza, la calidez y la humanidad que ellos manifiestan enfrentando todo eso día tras día.

Gracias por hacerme rememorar lo que sentí viendo esta película. Seguro que valdría la pena volver a verla.

George de Boston